jueves, 15 de octubre de 2015

Nuestros sentidos: el oído

Con los ojos cerrados y prestando mucha atención a nuestra respiración nos detendremos en escuchar.

La primera escucha la haremos hacia nuestro propio cuerpo. Escucharemos todos los sonidos que provienen de nuestro propio cuerpo mientras que no prestaremos atención a ningún otro sonido.
Siempre sin juzgar, ni adivinar, ni opinar... Simplemente percibiendo los sonidos.
  • Nuestra respiración
  • Latido de nuestro corazón
  • La salibación
  • Algún movimiento de nuestro cuerpo
  • ...

A continuación, no prestaremos atención a nuestro cuerpo y pasaremos a captar los sonidos de nuestro alrededor, dentro de nuestra propia clase.
Siempre sin juzgar, ni adivinar, ni opinar... Simplemente percibiendo los sonidos.
  • Alguna silla que se mueve
  • Tos o estornudo de un compañero/a
  • Algún objeto que se cae
  • ...
Nuestra atención se dirigirá ahora al exterior de nuestra clase ignorando todo lo demás. 
Siempre sin juzgar, ni adivinar, ni opinar... Simplemente percibiendo los sonidos.
  • El profesorado y alumnado de aulas contiguas
  • Las personas que pasan por el pasillo.
  • Algunos niños que cantan, ríen, gritan...
  • Los sonidos de las personas que están en el patio
  • Coches que pasan por la calle
  • ...

Para finalizar integraremos todos los sonidos: nuestro cuerpo, nuestro alrededor y el exterior siempre percibiendo y siempre sin juzgar, ni adivinar, ni opinar... Simplemente percibiendo los sonidos.

Tras la experiencia comentaremos las diferentes impresiones que hemos vivenciado.

Tras la charla y las impresiones proponemos el el siguiente vídeo:




No hay comentarios:

Publicar un comentario