Al final de nuestra sesión de lenguaje hemos finalizado con la repetición de esta dinámica que ya hicimos anteriormente y llevaba por título La 1ª pasa de mi vida.
El desarrollo ha sido el mismo usando las mismas frases por lo que el recuerdo ha sido continuo:
- En tu mano dejaré algo pero no debes abrir los ojos ni cerrar la mano.
- Solo podrás verlo cuando suene el "din" del triángulo.
- Puede ser que tengas algo o no.
- No te precipites. Todos abriremos los ojos y de seguro lo vas a ver pero aún no llegó el momento.
- Aguarda y aprende a calmarte. Relaja tu cuerpo.
- No dejes que tu mente te domine por la ansia de saber. Ahora toca dejarte llevar.
- Si acude alguna idea a tu mente déjala ir en paz. Ahora no es el momento.
- ...
Todas estas frases se sucedían mientras iba repartiendo el "tan misterioso objeto". Era inevitable para los niños y niñas que a su mente acudiera la sensación de la pasa: su olor, imagen, ruído... Y el muy esperado u odiado, su sabor.
Una vez abiertos los ojos no era una pasa lo que les aguardaba en sus manos sino un llavero de una clave de sol azul.
Ha sido mi "regalo de reyes magos" para mis querido grupo de ladrones y ladronas de palabras.
Ha sido tal el momento que no han articulado un gracias, ni una palabra... El silencio y el asombro ha sido la tónica de la clase junto alguna palabra tímida: "maestra, ¿esto qué es?", "maestra ¿de dónde has sacado esto?"
En cuanto a de dónde vienen esos llaveros.... Os lo contaré en otra entrada.